La restauradora Patricia Mosquera nos presenta un espacio diáfano potenciado por la luz natural que atraviesa sus grandes ventanales. Lo primero que impresiona es la amplitud de la zona de estar, unida al comedor y a una cocina bien planificada y equipada.
Butacas de diseño, como la butaca Barcelona o la chaise longue LC4, se mezclan con elementos, que ella misma restaura, como las sillas del comedor o la alacena. Un patchworks de estilos que produce una mezcla llena de encanto que da una fuerte personalidad a este espacio.
El resultado es una estética blanca, diáfana, ordenada, donde todo invita a pasar buenos momentos junto al fuego de la chimenea.
Una opción tan diáfana que transmite orden y comodidad por la amplitud del espacio. Al mismo tiempo los pequeños detalles la hacen muy acogedora. Me ha gustado mucho
ResponderEliminarMe encanta esta entrada!!!!!
ResponderEliminarEsa mezcla de moderno y clásico, en la medida justa, hace que el estilo tenga carácter y que sea un lugar acogedor.
Me encantan los ventanales que dejan pasar la luz natural y que te invita, en verano, a tomar algo en la piscina mientras tomas el sol....
¿Qué voy a decir yo? Los propietarios son unos grandes anfitriones y los mejores amigos que se puede tener y el estilo, gusto y perfeccionismo de ella es lo que hace que el resultado de esta cas sea el que es.
Muchos besos
Qué combinación de estilos, me encanta, todo muy bien elegido. Enhorabuena por el resultado !!!
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